¡De Construir! De eso se trata el amor
¿Sabemos a ciencia cierta lo que es el amor?

Al escuchar la palabra “amor” inmediatamente pensamos en una relación sentimental, pero por supuesto, también existe el amor a la familia, a los padres, a nuestros amigos, a nuestro trabajo, a nuestra mascota, a nuestro hobbie, a la vida, en fin, a muchas cosas más por las que podamos percibir ese bello sentimiento. Si, si es verdad que lo más “comercial” por así llamarlo, es el amor de pareja. En los comerciales, en las películas, en las telenovelas, vaya en la música. El 95% y si no es que más, se relaciona con éste tipo de amor y está bien, porque en mercadotecnia es “de lo que más vende”. Pero, ¿realmente es como nos lo pintan, como lo muestran ese sin fin de historias felices?
Si, si es así de bonito. Cuando es mutuo. Cuando es sincero. Cuando es equitativo. Cuando es solidario. Cuando no es que deba ser, sino que quiera ser. Cuando se lucha, porque las dos personas quieren. Cuando no hay pretextos, excusas, culpas. Y no es que no deba haber errores, es muy normal. Nadie es perfecto. Lo perfecto es cuando alguien te ama aún así, con todos tus errores, tus defectos, tus manías, tus ideales. Eso, eso es amor. Y no se da de un día para otro, cuando realmente es amor no. No se da nada más porque si, no se da de la noche a la mañana y muchísimo menos se da con cualquier persona. Hay una frase famosa que mi papá me dice micho: “El amor es como una plantita, hay que regar y regar y regar todos los días” y con todos los días se refiere a que no sólo cuando se vea que la plantita ya se va a marchitar. Sino siempre.
Actualmente muchas parejas deciden permanecer con una persona por el simple hecho de no sentirse solas, por tener miedo a lo que venga después de, así la relación ya esté más que fracturada, ahí siguen. Y no es masoquismo, es... Mmmm ¿cómo decirlo sin ofender a varios? Dejémoslo en falta de inteligencia.
Cuántas y tantas mujeres o hasta hombres, ¡porque también existen casos eh! aceptan golpes, insultos, ofensas, infidelidades, abuso echándose la culpa ellos mismos o simplemente soportando todo “por amor”. Perdón, pero quién ama, no hace nada de eso, y muchísimo menos sé ama a uno mismo, por aceptar ese tipo de cosas y por ahí es por dónde se debe empezar, por el amor propio. Sino te amas a ti, ¿cómo puedes decir que amas a alguien cuando no sientes ni tantito amor por ti?
Bueno, una vez que ya te amas. Es muy fácil amar a alguien, y no digo que sea tan fácil como para que lo hagas de cualquiera, porque no, eso no pasa. Realmente uno no elige, de repente te empiezas a dar cuenta que ya quieres a alguien, que ya sientes cosas por él o por ella, que ansias mirarle, que estás dispuest@ a ayudarle en lo que necesite y le haga feliz porque te importa cómo se siente.
Pero más allá de sentir todo eso, es ir construyendo tu relación día a día. Es compartir cualquier mínimo detalle con la que persona con la que decidiste estar, tú día a día, tus fracasos, tus éxitos, tus anhelos, tus preocupaciones. Crear, hacer, estar y ser. No idealizar a una persona, aceptarla tal y como es y con todo lo que conlleva su vida.
Pero sobre todo construyan, construyan con dedicación, esfuerzo, pasión, respeto, confianza, comunicación y dedicación ese amor tan grande.
Amen. Así, sin acento. ¡Amen mucho!